Para expandir y hacer más eficientes las llamadas tecnologías limpias, además de buenas ideas se requiere hacer que circule el dinero.
Si la Unión Europea quiere reducir 20% sus emisiones de cambio climático para el 2020, debe invertir en la próxima década al menos 50 mil millones de euros en investigación y desarrollo de energías alternativas. “Sé bien que no gastamos mucho. Apenas invertimos en este rubro tres mil millones al año y calculamos que necesitamos ocho mil millones de euros adicionales para alcanzar de manera exitosa, resultados en nuestros objetivos tecnológicos”, expresó Andris Piebalgs, comisionado europeo en Energía.
Para hacer operativo el recién creado Plan Estratégico de Tecnología y Energía, la Unión Europea buscará impulsar una mayor inversión en el sector de innovación en los 27 países integrantes, además de crear un fondo especial en el banco de la región. Janez Potocnik, comisionado europeo en Ciencia y Tecnología, manifestó: “mantenemos la cautela y en estos tiempos de crisis parecería que invertir en tecnologías bajas en carbono es un lujo, pero es justo lo contrario”.
También fomentará una mayor participación del sector privado, noticia que ha sido bien recibida por algunas empresas. “Las áreas estratégicas en las que emplearemos los recursos son para la investigación en la nueva generación de turbinas de viento, estaremos buscando aplicar el financiamiento en desarrollos que permitan aprovechar el viento en Europa, con el cual hemos sido bendecidos, además de trabajar en reducir nuestros costos”, indicó Justin Wilkes, presidente de la Asociación Europea de Generación Eólica.
Consideran que este esfuerzo conjunto facilitará alcanzar las metas regionales, como generar 12% de la energía para el 2020 con fuentes alternativas. “Debido al poco tiempo que tenemos debemos ser extremadamente ambiciosos para alcanzar en el 2020 resultados de más de 20% de reducción de emisiones, porque en el 2050 deberemos recortarlas al 80%”,declaró Andris Piebalgs.
Y lo más importante, se evitaría una eventual dependencia tecnológica de Europa frente a naciones como Estados Unidos y Japón, que también trabajan en mejorar las energías limpias.
Fecha: 8 de octubre del 2009
Reportero: Rafael H. Guadarrama
Fuente: Once Noticias
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